domingo, 27 de enero de 2013

El Antiguo Egipto y la ley VI

En Deir-El-Bahari , tenían sus propias leyes y resolvían los casos referentes a faltas y delitos, eso se comentó en uno de los posts anteriores cuando se citó algún caso en concreto.
La qenbet o kenbet era el nombre que recibía el tribunal de justicia en el poblado.
Lo componían varios miembros de los habitantes de la comunidad de artesanos, personas justas y con fama de ser personas con moral y ética, capaces de poder impartir de una forma justa la justicia.
Recordemos que según la estructura del poblado, este podía dividirse en dos grupos de viviendas, es decir, los que habitaban a la derecha y los que habitaban a la izquierda.
El tribunal qenbet, tenia que estar constituido por personas de los dos grupos y el presidente podía ser elegido entre todos los miembros del poblado.
El tribunal, pues, tenía el poder de decidir sobre los delitos que cometieran los habitantes del poblado, pero si el delito era más grave, era el tribunal de Tebas quien tenía que juzgar a las personas que presuntamente lo habían cometido. Entre los delitos considerados muy graves estaba la violación, la apropiación de objetos pertenecientes a los muertos y, como dije antes, el perjurio. Y es que el perjurio, es decir, jurar en falso lo que hacia es desquilibrar el orden de Maat.
Con respecto a los castigos sobre los infractores de la ley, hice en post anteriores un listado.
El perjurio, es decir, mentir estando bajo juramento, era uno de los delitos que los antiguos egipcios consideraban como muy graves.
Esto es lógico, ya que para ellos era una terrible ofensa contra los dioses y contra el propio faraón, en una sociedad como la egipcia esto podía desequilibrar el principio básico del orden, es decir era un atentado contra la Maat.
La palabra de un testigo, la palabra de cualquier persona relacionada con el caso tenía fuerza porque consideraban que la persona iba a ser sincera y no iba a mentir, de ahí los castigos tan severos aplicados a una persona que deliberadamente mentía habiendo prestado juramento.
En el ostracon número 61 , hallado en Deir-El-Medina y que actualmente se encuentra está en el Museo Petrie, podemos leer el juramento que la persona debía hacer.
"Tal y como es verdad que Amón vive y que también el faraón vive, si no devuelvo ese "shat" y medio cobre (a su dueño...) en el plazo de un mes, entonces deberé yo pagarle el doble"
Los procesos de los juicios necesitaban una serie de personajes para llevarse a cabo, de ellos he hablado anteriormente, pero vamos a ver las funciones que ellos realizaban. Unos de los sujetos importantes en los juicios eran los escribas judiciales. Todo el proceso, todo lo que allí, en el juicio de hablaba o se hacía tenía que ser recogido por estos escribas. Ellos constituían el acto del procedimiento jurídico. Y eran ellos los encargados de escribir las sentencias, dictadas por los jueces , para su conservación en los archivos judiciales.
El ser escriba era uno de los trabajos más populares en el Antiguo Egipto, y la presencia de escribas era obligada en diferentes actividades, tales como contar genero, alimentos, reclutar personas, impuestos, actos judiciales,etc etc.

No hay comentarios:

Publicar un comentario