miércoles, 7 de noviembre de 2012

Peri Em Heru conjuro XXVI

Para devolver el corazón al difunto en el imperio de los muertos

Que diga: "Mi corazón me pertenece en la casa de los corazones, la íscera de mi corazón me pertenece en la casa de los corazones. ¿Que pueda tener mi corazón, porque está dichoso conmigo! Si no, no podré comer las galletas de Osiris en el lado oriental del estanque de las flores; un barco Khubet bajará el río, otro lo remontará, pero no podré ir en el barco en el que tú estarás. ¡ Que pueda tener mi boca para poder hablar, mis piernas para caminar y mis brazos para derribar a mis enemigos!
Las puertas del cielo se abren para mi; Geb, el príncipe de los dioses, abre para mí sus mandíbulas hacia mí,; abre mis ojos, que estaban cerrados; extiende mis piernas, qu estaban replegadas. Anubis fortalece mis rodillas, de forma de que puedo ponerme en pie, y Sekhmet la divina me pone en pie. Se ejecuta lo que he ordenado en Menfis. De nuevo tengo conocimiento gracias a mi corazón, uso la víscera de mi corazón, uso mis brazos, uso mis piernas y tengo la posibilidad de hacer lo que desea mi ka; no mantendrán prisioneros mi alma y mi cuerpo a las puertas del Occidente.
 Y ahí acaba, es como se puede observar, un conjuro corto.
El difunto considera que su corazón, hati era una de las partes del ser humano y por eso hace referencia a él.

El corazón era el centro de la vida afectiva y física de la persona. Es además la sede de la voluntad y de la inteligencia del individuo.
El Osiris N ,necesita poder usar sus corazón para así poder vivir en el más allá y poder realizar todas las funciones necesarias allí... poder pensar. moverse, caminar, amar, etc.

Se llama casa delos corazones a la sala donde se realiza el juicio de Osiris

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